Romina McCandless nació en Argentina en 1983. Cuando tenía solo un año, sus padres decidieron buscar un futuro mejor para la familia y partieron con ella y su hermanito recién nacido a Sudáfrica. Después de vivir ocho años allí, se mudaron nuevamente, esta vez a Hilton Head, Carolina del Sur. Romina creció y se convirtió en una apasionada profesional del campo de la salud y activista en su comunidad. Como miembro del consejo directivo de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), ella tuvo un rol importante en el proceso de la apelación de la ley SB 20.
Marina López: ¿Cuáles son las cosas que has hecho con el ACLU y respecto de los cambios de políticas en Carolina del Sur?
Romina McCandless: Bueno, hasta ahora—como soy parte del consejo directivo, muchas veces cuando el ACLU está tomando decisiones de cuáles son los casos que va a pelear y cuáles no, nosotros estamos—como parte del consejo directivo—ofreciendo nuestras opiniones también, claro que ACLU va a hacer lo que manda el ACLU nacional, así que no siempre puede ser a nivel estatal.
Pero siempre piden nuestras opiniones a ver qué pensamos antes de tomar decisiones.
Pero—otra cosa es que cuando hay eventos, el ACLU, para informar a la comunidad, entonces yo estoy promoviendo mucho eso, y tratando de repartir información sobre los derechos, información que da el ACLU, cada vez que vamos a un evento comunitario donde está el ACLU involucrado, me da vergüenza a veces pero casi siempre me introducen, “Y Romina que es parte del consejo directivo, que hace mucho trabajo para abogar para la comunidad” y me da vergüenza, no sé por qué.
Pero como que creo que para el ACLU, tener una persona que está representando el ACLU por parte de la comunidad hispana, para ellos es importante tener eso.
ML: Contarme un poco de la gente que en el estado de Carolina del Sur estuvo peleando por los derechos de los hispanos cuando salió la ley del estado nuevo, y cuando se peleó la ley a nivel federal, contarme de ese proceso.
RM: Bueno, realmente era primeramente buscar a las personas que estaban alineadas con los valores y las posiciones del ACLU, y típicamente son personas más liberales o menos conservadores, pero también son personas conservadoras, por ejemplo, dueños de campos que tienen muchos trabajadores migrantes, porque ellos sienten la importancia de tener inmigrantes aquí porque es su negocio, dueños de compañías de construcción, dueños de compañías de jardinería, dueños de complejos de apartamentos, dueños de parqueaderos de trailers, dueños de lugares de vivienda donde vive mucha gente hispana, ellos también salieron a apoyar al ACLU en combatir la ley o tratar de [Incomprensible] la ley.
Personas que—cómo se llaman—pastores o personas de iglesia, también ellos salieron, y personas hispanas que eran ciudadanos que tenían la posibilidad de votar, también salieron.
Organizaciones como NAACP, que es una organización que protege los derechos y promueve los derechos de los afroamericanos. Bueno, cuando ACLU se trató de alinear con ellos un poco porque ellos también pasaron por muchas de las mismas experiencias que está pasando por la—que está pasando la comunidad inmigrante durante los años sesenta y cincuenta, y hasta a veces en los setenta, pero también con los tiempos de la guerra civil aquí en Estados Unidos.
Entonces pasaron por muchísima discriminación, entonces ellos vieron como una parte similar, entonces muchos líderes de la comunidad afroamericana también salió a hablar a favor de los inmigrantes.
La comunidad lesbiana y—cómo se llama—LGBT que le dicen en inglés, ¿No?—la comunidad homosexual y transexual salió también por la misma cosa, ellos sentían que habia mucha discriminación contra los inmigrantes, entonces ellos también salieron y todos se presentaron frente de la corte y los abogados, y dieron su testimonio y trataron de presentarlo de un punto de vista, escribiendo artículos al periódico—yo escribí uno también.
Hasta por ejemplo, ciertos proveedores de servicios de salud, hablamos sobre cómo está partiendo las familias algunas de estas leyes migratorias.
Entonces muchísimo apoyo de varios lugares y el ACLU buscó donde están los allies—que le dicen en inglés—dónde está la gente que está de acuerdo con que los inmigrantes estén aquí. Tal vez no amnistía para todos pero que estén de acuerdo con que exista una ley de reforma migratoria.
Y encargó también al consejo directivo de ayudar a encontrar esas personas también.
ML: ¿Cómo ves que ha cambiado para el impacto que ha tenido en la comunidad la ley de Obama, el—bueno, no es ley—el DACA?, el Deferred Action, ¿Cómo—
RM: ¿El Deferred Action para los estudiantes?
ML: Para los estudiantes, para los [Incomprensible]
RM: Especialmente para los padres que tienen hijos aquí, que vinieron a una edad temprana, es como que es una gran esperanza de que “Ahora no tengo que preocuparme con que me vayan a deportar a mi hijo, ahora sé que mi hijo tiene la oportunidad que vinimos aquí a este país para que tuviera mi hijo”, y es como que si me deportan a mí, no me importa porque por lo menos ya sé que mi hijo está en este país y va a poder tener esa oportunidad.
Y es como que es una esperanza, una gran esperanza, y mucha gente lo ha visto como el primer paso a una reforma migratoria.
Y la verdad es que vimos muchas personas que—hasta que llegaron a este país y que tal vez no estudiaron, no terminaron la high school, no hicieron el [Incomprensible], de repente estamos viendo que mucha gente está empezando a buscar, entonces eso es bueno también para el país, porque si uno se pone a pensar, si tenemos personas más preparadas, más educadas, eso promueve—mejora a economía también.
Entonces yo pienso que la gente está empezando a sentir como que tiene más valor de lo que tenía antes, y ahora con la reforma migratoria, también es como que lo—yo veo que más—como que hay más esperanza.
Lo que veía mucho antes es que la gente como que—cuando hablaba, siempre hablaba de miedo, de que si—bueno, toda la gente claro, pero escuchaba mucho de parte de la gente de que “Me da miedo salir, no quiero manejar de noche porque qué pasa si me para un policía, siempre trato de viajar con mis hijos porque hay menos posibilidad de que me manden de vuelta”, y aparte la ACLU ha tenido un impacto bastante grande en esta zona porque, con todo el trabajo que están haciendo en enseñar a la gente sobre sus derechos, como que la gente ahora sabe, “Si no quiero hablar al policía, no tengo por qué hablarle, si llego a la cárcel no tengo que firmar los papeles que me tratan de forzar a firmar, yo tengo el derecho de llamar a un abogado, yo tengo derecho de tomar estas acciones antes”.
Y claro que hay mucha gente que todavía no lo sabe, pero por lo menos la palabra ya está empezando a correr por la comunidad.
Y los líderes que existen como que están empezando a hablar más, entonces se está viendo crecer la fuerza en la comunidad hispana ahora.